Las aplicaciones VPN comenzaron a extenderse poco a poco hace unos años entre un grupo de usuarios compuesto predominantemente por aficionados a la tecnología y especialistas del sector. Estos usuarios se sintieron atraídos por la posibilidad de contar con un nivel de ciberseguridad nunca antes visto a la hora de navegar por la red, además de por la opción de sacar mejor provecho a internet mediante el cambio de IP.
Desde entonces, el crecimiento del uso de las VPN ha sido imparable. Lejos de ser una aplicación conocida solamente por unos pocos, las herramientas VPN han pasado a integrarse en la suite de herramientas de ciberseguridad esencial para todo tipo de usuarios, combinándolos de forma habitual con un antivirus y, en los casos de las VPN más avanzadas, incluso realizando suplantaciones en ocasiones.
Se estima que un 44% de los mexicanos y mexicanas ya usa una VPN de pago para protegerse a la hora de navegar online, un porcentaje bastante alto en comparación con el promedio mundial. Muchos incluso hacen uso de un router VPN para proteger todos los dispositivos del hogar, abarcando así los asistentes virtuales, las consolas de videojuegos o la smart TV. Pero
¿qué hay detrás de este ‘boom’ de las VPN en nuestro país y en el mundo?
La seguridad de una conexión cifrada
Una de las características principales de las VPN ha sido siempre la encriptación de la conexión a internet para mantener nuestros datos de navegación a salvo. Estos sistemas de cifrado impiden a los proveedores de internet y a terceros acceder a la información que enviamos o recibimos desde nuestros dispositivos, algo que tiene un especial valor en países con una censura digital muy estricta como China, Rusia o Irán.
Pero no solo los usuarios de estos países pueden beneficiarse de la privacidad de una VPN. El cifrado se ha convertido en una función esencial a la hora de hacer reservas online o acceder a nuestras cuentas privadas desde redes Wi-Fi públicas. Este tipo de redes son un entorno perfecto para que los hackers traten de apoderarse de nuestros datos bancarios o nuestras contraseñas personales, pero el cifrado de una VPN es capaz de impedirlo.
Las ventajas del cambio de IP
Otra de las funciones que está haciendo cada vez más extensivo el uso de las VPN es el cambio de IP. De nuevo, esta característica tiene usos específicos en países con censura digital, porque permite a los usuarios conectarse a una IP extranjera y acceder a contenidos que de otro modo les estarían vetados. Pero, además, el cambio de IP es una de las características favoritas de los usuarios en México por sus ventajas a la hora de comprar o contratar servicios.
Está especialmente extendido el uso de herramientas VPN para conectarse a servidores de Estados Unidos o Europa y acceder a servicios de streaming que no están disponibles en nuestro país. Pero, además, también se puede usar una VPN para conseguir mejores precios a la hora de hacer reservas en aerolíneas o en hoteles, sobre todo si el cambio de IP trae consigo un cambio de divisa en la web de reservas.
Servicios extra de ciberseguridad
A estas dos grandes características hay que sumar además la incorporación de toda una serie de servicios de ciberseguridad extra en las VPN más prestigiosas. Estos incluyen la protección antiphishing, la protección antimalware, e incluso el bloqueo de publicidad. De este modo, la contratación de una VPN permite acceder a un servicio integral de ciberseguridad con un excelente conjunto de ventajas por muy poco dinero al mes.
Toda esta serie de funciones de seguridad digital han ido aumentando el nivel de ciberseguridad de los usuarios en un contexto en el que los hackeos no han dejado de multiplicarse en los últimos años, tanto en nuestro país como internacionalmente. Por eso no es de extrañar que desde las empresas más grandes hasta los usuarios particulares esté aumentando la conciencia de la necesidad de protegerse ante estos posibles ataques.
La guerra cibernética, un nuevo nivel de inseguridad digital
Recientemente, además, estamos asistiendo a una escalada en las tensiones digitales entre las grandes potencias globales. Desde Estados Unidos se ha acusado a China de haber llevado a cabo hackeos en servicios civiles estadounidenses críticos como el suministro del agua o la red eléctrica, elevando el nivel de preocupación en materia de seguridad digital. Cuando las principales plataformas de noticias insisten en que nadie está completamente a salvo de los hackers, y cuando vemos que el número de ciberataques aumentan sin cesar tanto en México como en el exterior, parece lógico que las cifras de uso de las VPN aumenten de forma acorde. Sus sistemas de cifrado, de ocultación de IP y de protección antiphishing son cada vez más valiosos, así que cabe esperar que su alcance continúe en aumento.